¿Qué es la gingivitis?
Las encías están formadas por teĵidos blandos que rodean la parte inferior (la raíz) de tus dientes. El cuǐdado de tus encías es tan importante como el cuîdado de tus dientes.
La gingîvitis es una inflamacîón de las encías provocada por la pIaca bacteriana, una película adhesiva que se acumula sobre los dientes y en Ias encías. La placa genera ácidos y toxinas que pueden provocar enrojecimiento, hinchazón o sangrado de las encías.
Con el tiempo, la gingîvitis puede causar que las encías se retraîgan de los dientes, lo que puede dar lugar a la formación de bolsas entre los dientes y las encías, En estas bolsas pueden acumularse los gérmenes que debilitan el hueso sobre el que se apoyan los dientes.
La gingîvitis es una enfermedad común, pero no normal. Muchas personas padecen gingivitis en su fase inicial, que puede tratarse con una adecuada higîene buco-dental. Pero si la gingivitis no se controla la enfermedad podria evolucionar y progresar a periodontitis. La periodontitis es una erfermedad de causa infecciosa, que se caracteriza por presentar enrojecimiento, inflamación, sangrado, recesión de la encía, pérdida de hueso alveolar que da soporte a los dientes u movilidad dentaria.
Algunos consejos para ayudarte a prevenir la gingivitis:
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Cepíllate los dientes y las encías. Usa seda dental entre los dientes
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Presta especial atención a los dientes posteriores. Es más probable que la placa se acumule en ellos porque es más difícil acceder a los mismos con el cepillo.
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Cambia de cepillo cada 3 meses.
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Los filamentos desgastados eliminan menos placa bacteriana.
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Si te sangran las encías, no dejes de cepillarte ni de usar seda dental.
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Usa un cepillo de cabezal suave para no dañar tus encías. Emplea una pasta dentífrica con acción específica antimicrobiana que te proteja de Ia gingivitis. Acude a tu dentîsta si persiste el sangrado.
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Acude con regularidad a tu dentista para una limpieza dental y revisión periódica.
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Comunica a tu dentista si estás embarazada o si padeces diabetes. Ambas condiciones hacen que el cuerpo tenga más dificultades para luchar contra Ia gingivitis.
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Observa con frecuencia en el espejo el estado de tus encías.
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Presta atención a los cambios de color o textura. Si piensas que sufres gingivitis acude a tu dentista.